El pastor estadounidense Terry Jones, líder de una pequeña iglesia sin denominación de Gainesville (Florida), la Dove World Outreach Center, y que no cuenta con más de 50 seguidores, ha levantado una auténtica polémica mundial al anunciar para el próximo sábado la quema de ejemplares del Corán, coincidiendo con el noveno aniversario de los ataques a las Torres Gemelas.
El pastor Jones aseguró que con este acto «vamos a mandar un claro mensaje al Islam…no dejaremos que su terror nos controle, no seremos dominados…creemos que ha llegado la hora de que América sea América». El pastor desea instaurar con este acto «el Día Internacional de la Quema del Corán», aunque desde su anuncio ya ha recibido centenares de amenazas de muerte. El alcalde de la ciudad, Craig Lowe, ha intentado contrarestar la propuesta del pastor declarando que el sábado será considerado en Gainesville como «Día de la Solidaridad Interreligiosa»; el alcalde de Gainesville ya había tenido conflictos con el pastor, al declarar el primero públicamente su homosexualidad y el pastor responder con pancartas en las que se podía leer «no queremos un alcalde homo».
Anteriormente a estas declaraciones, el pastor había dirigido una iglesia en Colonia (Alemania) durante los ochenta, donde combinaba su tarea de pastor con la de vendedor de muebles de segunda mano por Internet; ya en esa época manifestaba públicamente sus ideas racistas y antimusulmanas. La hija de su primer matrimonio, Emma Jones, ha revelado en una entrevista para Spiegel que su padre empleaba además los fondos de la iglesia que lideraba para sus gastos personales, motivo por el que abandonaría Colonia para instalarse en Florida en 1996. La hija del pastor califica al grupo de su padre como una secta, basada en en el control de sus miembros y en un marcado autoritarismo. Al pastor es habitual verle pasear con su pistola y en el pasado algunos niños de la iglesia de Jones acudieron al colegio con camisetas en las que se podía leer «el Islam es el diablo». Al mismo tiempo, se declara un fan de la película Breveheart, habiendo puesto en circulación en Internet una serie de vídeos llamados Braveheart Show en los que se critica al Islam.
Los principales líderes judíos, musulmanes, católicos y evangélicos han condenado la «histeria antimusulmana» manifestada por el pastor Jones. Pese a que ha recibido diversas llamadas de algún líder religioso y haber recibido la visita de los agentes del FBI, la Primera Enmienda de los EEUU permite que el pastor Jones pueda hacer lo que le plazca. Al parecer, hoy Jones ha declinado su iniciativa antimusulmana.