Un ex miembro de Scientology, Brian Mandigo, interpuso recientemente una reclamación ante la FDA (Food & Drug Administration) «por el empleo que hacen Scientology y sus entidades ligadas del e-meter sin seguir las advertencias que en su día se ordenaron judicialmente». La reclamación se fundamenta en la evaluación que realizó la misma FDA en los sesenta, cuando examinaron más de 100 e-meters de diversos centros vinculados a Scientology. De aquellas evaluación y de la decisión del juez, se indicó que: «el e-meter tan sólo puede ser empleado o vendido para el uso del consejo religioso». Asimismo, el juez que evaluó el caso determinó que cada aparato debería llevar la siguiente advertencia en su parte frontal claramente visible y a 11 puntos de letra: «el e-meter no es médica o científicamente útil para el tratamiento, prevención o diagnóstico de ningún problema médico. No es científica ni médicamente capaz de mejorar la salud o las funciones corporales de nadie».

En la presente reclamación, el denunciante argumenta que Scientology ha continuado empleando el e-meter fuera de los contextos pretendidamente religiosos a la vez que sin seguir las indicaciones del juez, colocando la advertencia mencionada en la parte trasera del aparto fuera de la vista de las personas que se someten a las sesiones de auditación con el e-meter.

La FDA ha aceptado la reclamación de Brian Mandingo e iniciará una nueva evaluación de los e-meters de Scientology.

El e-meter es una variante de un detector de mentiras que es empleado por Scientology para sus sesiones de «counseling» o «auditación». El aparato fue inventado por el quiropráctico Volney G. Mathison -seguidor a su vez de Dianética- y se conocía inicialmente como el «electropsicómetro Mathison». Tras una disputa entre Hubbard y Mathison, el aparato dejó de emplearse durante varios años, hasta que finalmente fue reintroducido por Scientology en sus prácticas de «auditación». Al poco tiempo, la FDA intervendría al saber que Scientology utilizaba este aparato para la práctica ilegal de la medicina. Según Scientology, el e-meter puede ayudar ante todo tipo de condiciones médicas, a la vez que supuestamente ayudaría desarrollar la inteligencia y otro tipo de capacidades.